Volvemos al evangelio segun san Marcos en el que se nos habla en este domingo de la pureza espiritual. De hecho la pureza es una virtud cristiana que implica el evitar todo aquello que mancha el alma del hombre, es decir el pecado. Que en tiempos del Antiguo Testamento esa pureza se expresaba tambien en ritos o abluciones con agua para lavarse, eran mas que todo actos de higiene, que tambien son necesarios para mantener el cuerpo sano, pero no estan del todo vinculados a una pureza espiritual que nos manda el Biblia. Se puede acentuar un tanto el cumplimiento del sexto y del noveno mandamiento que estan relacionados con los actos del hombre en su comportamiento sexual, y que deben estar regidos sobre todo por la castidad, la virtud de la templanza, entre otros.